martes, 24 de mayo de 2022

Mi colección de velas de Book&Glow



Desayuno en Central Perk fue mi primera vela de Book and Glow y la compré por recomendación de @marikowskaya. Le tengo cariño porque (pese a que no es de mis preferidas porque tiene un olor un poco fuerte) es la que inició mi aventura con estas velas. Como se puede ver por la etiqueta, está inspirada en la serie Friends y su olor es muy dulce e intenso. Según dicen en la web, primero se percibe el olor de la masa de la magdalena, con el toque ácido de los arándanos y finalmente un toque suave de capuccino para redondear el conjunto. Sus notas son de arándano azul, mantequilla, canela, vainilla, masa de magdalena y café.




Andalucía es una vela de la colección Wanderlust que ha cambiado de nombre y que ahora encontraréis como Patios de Andalucía. Al contrario que la anterior, esta tiene una intensidad baja y muy agradable: el olor no invade la habitación pero sí la impregna de un perfume que a mí me resulta muy acogedor. 
La idea es que su olor nos transporte al sur, con naranjos en cada calle, frescos patios con jazmines y soleados campos de olivos que se extienden hasta el horizonte. Yo ya la he acabado de todas y me ha gustado mucho.

Como podéis ver, Se acerca el invierno tiene un envase diferente a las anteriores y eso es porque esta vela la compré hace pocos meses, después de que renovaran su imagen. Es una vela estacional que solo se puede comprar en invierno y que recuerda a Juego de Tronos. Aunque aún no la he quemado, su olor me resulta muy agradable, a brisa del bosque helado del norte y dulces especias para entrar en calor. ¿Os parece imposible que una huela huela a aire fresco? Pues tenéis que probar esta.



Bajo el mar es una vela estacional de verano dedicada a la Sirenita, con olor (literal) a fiesta marina. Esta vela fusiona las notas marinas con orquídea rosa. Tiene un olor muy fresco y con un punto dulce que es ideal para el verano. Si os suena bien, estad atentos porque pronto volverá a estar en catálogo.


Otra vela veraniega es El verano perfecto y es la que (en catálogo) me llamaba más la atención por sus notas: sandía, melón, coco... Un aroma dulce de frutas veraniegas que me encanta para la época de calor.
 




El tercer olor veraniego (sí, el año pasado me las compré casi todas) es Noche de verano. Es la vela de verano que más he usado porque su olor en realidad es perfecto para cualquier época del año: sueños de cedro y de bergamota, según la descripción. Lo cierto es que es un olor muy floral, verde y agradable que impregna la habitación pero sin resultar excesivo.


Pasamos del verano al invierno con la última de las velas estacionales de las que os voy a hablar en esta entrada: Una vez en diciembre. Aunque no la he encendido aún, sí que la he olido y sus notas son las de champán y fresas. Tiene notas de cítricos, violeta, moras, vainilla, fresas... muy dulce pero nada empalagosa. 









Rhysand es una vela que compré porque tenía un toque distinto al resto al contener purpurina morada en la superficie. En la etiqueta antigua la descripción es "cítricos, mar y poder", pero entre sus notas contiene mar, clavel, musgo de roble, cáscara de naranja, clavo y almizcle. Esas notas quizás son demasiado cálidas y especiadas para mí y debo decir que no se encuentra entre mis olores favoritos, aunque tampoco me resulte desagradable.

Y con esto acabamos mi colección de velas de la marca (por el momento). Y digo por el momento porque varias de las velas de las que os he hablado están a punto de acabarse por lo que estoy planeando hacer un pedido pronto. Ya os contaré...

domingo, 1 de mayo de 2022

Reseñas: productos de Tarte

Hoy os vengo a hablar de dos productos de Tarte que no son nuevos en el mercado pero sí para mí, ya que es mi primera vez probando esta marca. El primero es la máscara de pestañas Lights, Camera, Lashes, que se vende como un clásico de culto desde hace más de una década: alarga, riza, da volumen y acondiciona las pestañas, actuando como un sujetador push-up. 
En mi opinión, es una buena máscara de pestañas: las deja muy negras, sin grumos y alargadas, aunque considero que no ofrece demasiada densidad a la pestaña.



Como podéis ver en la foto, el gupillón es bastante estándar, aunque es fácil de aplicar ya que no se acumula demasiada fórmula en él y sale relativamente limpio del tubo. Es pequeño por lo que es fácil de aplicar en el extremo de las pestañas sin mancharte el párpado. Como punto positivo, también añadiría que la fórmula no se cae por la ojera a lo largo del día y que no mancha demasiado la parte superior del párpado, como me pasa con muchas máscaras en mis ojos encapotados. No obstante, no es mi favorita porque me gustan las fórmulas que proporcionen más volumen.



Sigo hablando del corrector de ojeras Creaseless concealer. Es un corrector vegano, hidratante y bastante grueso que promete durar hasta 16 horas sin resecar la ojera.
Es cierto que hace falta muy poca cantidad para tapar la ojera, que es donde yo lo utilizo. Es muy hidratante, por lo que lo sello con los polvos de Hourglass. Lo cierto es que el resultado recién aplicado me gusta, pero considero que con el paso de las horas el corrector desaparece en mi piel, como si esta lo absorbiera, y a lo largo del día mis ojeras son perceptibles (y eso que no tengo demasiadas). No obstante, no quiero criticarlo demasiado ya que últimamente está haciendo bastante calor en Madrid y no hay maquillaje que resista demasiado bien.







En esta foto podéis ver el resultado de la aplicación del corrector en ambos ojos y de la máscara de pestañas tan sólo en uno de los dos (en el derecho según se mira la foto). Creo que se puede ver que el efecto del rímel es bastante bueno y no tanto el de el corrector. ¿Y vosotros qué opináis? ¿Habéis probado algún producto de la marca?