Llevo meses, si no años, escuchando hablar de este producto, especialmente a la blogger y youtuber inglesa Anna de The Anna Edit y, sin embargo, nunca me había animado a probarlo. A lo largo del tiempo me he dado cuenta de que no soy una chica de labiales mates fijos (los odio, sin miramientos), pero tampoco he sido nunca fan de los glosses: demasiado pegajosos, sin nada de color y poco duraderos. Todo esto me hacía fruncir el ceño cada vez que ella nombraba las bondades de este producto de Clarins. No obstante, un día me decidí a probarlo y opté por el tono 8, plum shimmer, el más oscuro de toda la gama. A quien no esté acostumbrada a llevar color, un tono morado tan oscuro le puede dar miedo, pero en la realidad no es más que un ligero tinte en los labios. Después de probarlo... sí, estoy convencida, es un muy buen producto y os voy a contar por qué.
En primer lugar es tremendamente hidratante: según especifica la marca contiene manteca de mango silvestre y manteca de karité, que mantienen los labios nutridos e intensamente hidratados durante unas cuatro horas y nuevamente estoy de acuerdo: es verdad que el ligero color que aporta a los labios se desvanece antes, pero los labios se notan muy jugosos y no necesitas reaplicarlo una y otra vez, como sí sucede con muchos cacaos en barra.
Si seguimos con lo que dice la marca, también contienen un derivado de tocoferol asociado a un extracto vegetal (obtenido del salvado de arroz) que refuerza la protección de los labios. Además, posee nácares de origen mineral y pigmentos "luminosidad 3D" que multiplica el reflejo de la luz para unos labios visiblemente más lisos y deslumbrantes.
El producto (con textura densa de manteca) viene en un tubo de gloss tradicional con una esponjita en el extremo para depositar el producto.
En esta foto podéis ver el ligero halo de color que ofrece el producto, pero lo que sí es cierto es que aporta mucha luminosidad, sobre todo cuando estás a plena luz del día. No, no me he vuelto loca y sigo siendo una enamorada de los labiales tradicionales, ya sean mate o más cremosos, pero este es un producto/tratamiento que me encanta para días en los que no quieres ir maquillada (como a la salida del gimnasio) así como para aquellos momentos en los que los labios están más secos o agrietados. Una maravilla. Yo me hice con el mío en primor con un precio de 10,80 euros.
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